Atrévete con encuadres diferentes
Una misma toma puede variar mucho según la encuadremos, nos podemos poner a ras de suelo, inclinar la cámara, acercarnos más, menos... los resultados son muy diferentes.
Si cuentas con una cámara con muchos megapixels y no tienes claro el encuadre, dale aire a la escena, podrás encuadrarla luego a voluntad. Pero si estás seguro aprovecha al máximo toda la escena.
Tomemos como ejemplo una foto de una plegada en una curva, la acción está bien, mejor cuanto más deprisa vaya el piloto, pero si giramos la cámara para que la acción del piloto vaya de esquina a esquina, en diagonal, la perspectiva mejorará.
Las tomas a ras de suelo suelen quedar muy espectaculares.
Las subidas y bajadas. Un caso especial.
Acabas de hacer la subida de tu vida, tu amigo el de la cámara ha inmortalizado el momento, pero os paráis un momento, verificáis la foto en la pantalla y ¡ooooooh! no se aprecia la pendiente, ni la dificultad, las enormes rocas que la complican parecen planas...
Pues sí, es algo que ocurre, igual que cuando te tiras por una bajada que da vértigo, por no decir miedo, de esas que miras hacia abajo y le dices a tu amigo el fotógrafo... ¿y por que no te tiras tú?, pero vas y lo haces, en estos casos también puede suceder lo mismo.
En algunas ocasiones, si enseñas la foto puedes llegar a preguntar ¿bajaba o subía?
Es un caso complicado, pero tenemos opciones, la primera buscar el encuadre más apropiado, no hace falta que esté pasando el piloto. Si giramos la cámara para "falsear" la toma o hacerla más espectacular, la presencia de árboles o arbustos, que aparecerán inclinados, delatarán nuestro truco.
Del mismo modo, si la subida es grande la presencia y verticalidad de los árboles del entorno le darán, en justicia, todo el valor al momento de la acción.
Hay que tratas siempre de buscar el encuadre que más favorezca la acción. Incluso tomar fotos antes sin que baje nadie, y verificarlas. Merece la pena, aunque nos lleve un poco más de tiempo.
Miedo escénico
No es un mito, ni una frase hecha. Existe de verdad. Cuando montamos nos encontramos con multitud de obstáculos que resolvemos y atacamos con decisión. Muchas veces influye el ego que nos dice, " se va a enterar el que me sigue de lo que soy capaz" o bien, "si el ha pasado yo más". Es nuestro espíritu competitivo, la voluntad del endurero de atacar siempre los obstáculos.
Pero cuando vamos a hacer una foto miramos y remiramos el obstáculo una y otra vez, está ahí retándonos para que lo utilicemos para hacer la mejor foto de nuestra vida. Lo que también hace que en ocasiones nos lo pensemos demasiado.
Antes de nada debemos dejar una cosa clara. Si no te sientes seguro no lo hagas, el miedo nos agarrota, no pilotamos como debemos y nos podemos hacer daño. Si nadie te va a pagar por ello no te arriesgues nunca, ya habrá otras ocasiones y otros obstáculos.
También ocurre todo lo contrario, por querer salir bien en la foto, hacemos cosas que no debemos, nos distraemos mirando a la cámara y dejamos de pilotar cometiendo errores a veces con malas consecuencias.
Ponte guapo
Sí, como lo lees, te permitimos ir lleno de polvo, si es cubierto de barro incluso mejor todavía, pero antes de salir, si te van a hacer fotos, ponte tus mejores galas y ten la moto lo más bonita posible, el resultado final depende en buena medida de ello.
No hace falta que contrates un/una estilista, pero trata de llevar el equipo lo más combinado posible y que no esté roto, aplica lo mismo a tu compañera de aventuras. Cuida los detalles y tendrás mejores fotos.
A éste respecto recordad nuestro artículo "Piloto de enduro, cuida tu imagen" donde se indican una serie de consejos al respecto.
El Agua
Un recurso excelente para obtener una toma espectacular. Si empleamos una velocidad de obturador rápida, de 500 para arriba o en "modo deportivo" que tienen muchas cámaras, en buenas condiciones de luz quedan fotos muy buenas.
Observar siempre de dónde viene la luz para que trabaje a nuestro favor. Ya sea a contraluz o haciendo que brille el agua.
Una rueda levantada siempre queda muy bien, haciendo surf en los charcos y ríos, pero, como ya explicamos en el artículo dedicado a los pasos de agua, tener en cuenta que al bajar y entrar de nuevo la rueda en el agua, sobre todo si vamos rápido, la moto se frena bastante y hay que tenerlo en cuenta.
En el cruce de ríos y arroyos la dirección y la intensidad de la corriente también incidirá con fuerza sobre nuestra moto.
Resulta muy curiosa la forma en que salpica en ocasiones el agua, consiguiendo efectos muy atractivos.
Viene bien repasar nuestro artículo "pasos de agua" para tener en cuenta algunas cosas, por ejemplo: cuando la rueda delantera baja y entra en contacto con el agua la moto se frenará bastante"
El procesado
La mayoría de las cámaras digitales incluyen un software para el procesado de las fotografías que descargamos de nuestra cámara. En el podemos modificar o cambiar algunos parámetros. Si hemos tomado la precaución de dispararlas en modo RAW tendremos todavía más posibilidades, ya que este formato (crudo en inglés) no tiene ningún tipo de compresión y almacena por tanto mayor cantidad de datos.
Incluso en formato jpg tenemos opciones para modificar el brillo y el contraste como mínimo, pero hay que tener cuidad no "quemar" zonas sobreexponiendo la foto, con lo que quedarían sin ninguna información de color ni textura, o por el contrario, que queden áreas con un negro absoluto o macizo.
Los más aficionados sin duda dispondrán del Photoshop, con lo que la posibilidades aumentan. Si no dispones de él tal vez algún amigo te pueda ayudar a borrar cosas que no quieres, desenfocar zonas, corregir detalles, pero ya entramos en un terreno más complicado y que no es el objetivo de este artículo. Pero viene bien saber que existe esta posibilidad.
Espero que os sirva de ayuda para conseguir "esa foto que todo endurero siempre ha querido". Un deseo que seguramente tenemos todos y alimenta nuestro "ego endurero" y nuestro orgullo como pilotos.
Foto 1: En esta magnífica toma de Luis Ángel Sánchez ha empleado con habilidad la luz disponible en un contraluz del atardecer, convirtiendo el agua en una explosión de luz naranja, contribuyendo dar una impresión de velocidad y fuerza. El trabajo del piloto ha sido sencillo: pasar a toda velocidad por un charco, pero el resultado espectacular.
Foto 2: En esta foto de Iván Cervantes, en una magnífica plegada, el foto oscuro del bosque y la tierra oscura levantada acentúan la sensación de velocidad y centran la acción en el piloto.
Foto 3: En este caso el piloto tampoco está haciendo nada especial, pero la belleza del entorno y la luz hacen de ella una toma muy bonita.
Saber más sobre pasos de agua.